viernes, 8 de abril de 2011

Ensayo sobre la sexualidad en el matrimonio



¿Cuando el deseo trasciende, el matrimonio se debe a una necesidad insatisfecha?

Ya no alcanza con satisfacer nuestra necesidad del cuerpo con satisfacción física; Existe una dependencia almática, que en realidad es una deformación de la percepción del placer sexual y de las leyes morales. Existen leyes morales en el sexo, que tiene que ver con leyes naturales puestas por Dios en nuestra alma virgen al momento de concebirnos. Esa deformación de las leyes naturales lograda por el diablo, a través de la pornografía y demás, desembocan en un uso indebido y deformación de la sexualidad. El sexo es importante en el hombre y la mujer, porque le da IDENTIDAD. Cuanto el deseo sexual trasciende lo natural, es porque esta mal educado. Entonces tenemos la idea de que tal o cual cosa da placer y hemos visto a otras personas iguales a nosotros que practican esto o aquello y se ven experimentando un placer sin limites, (Algo obviamente ficticio). Y nos vamos haciendo a la idea de perseguir ese placer absoluto, en lugar de perseguir la unión (con nuestra pareja).

Vamos atrás del placer y no de la unión (El deseo debe ser hacia la persona, no hacia el placer), porque si el deseo es hacia el placer podemos apagar nuestro deseo utilizando cualquier cosa, otras personas, un objeto, un animal etc... Cuando el deseo trasciende el matrimonio, es un deseo que no puede ser satisfecho, mediante el acto en si mismo (porque no pertenece a él). Y habla de otras necesidades que trascienden lo sexual. Y pueden llegar a incidir gravemente en lo personal y/o social. Entonces al no encontrar satisfacción en el sexo en el matrimonio, recurrimos a por ejemplo la masturbación, que solo calma la sed de momento, pero que genera mayor aumento de libido, se potencia a si misma. La masturbación se potencia a si misma. En ella se hace uso de la imaginación y la imaginación es un rompecabezas que forma la mente con partes conocidas para conformar un híbrido. O sea que es producto de cosas, imágenes, relatos, pornografía metida en nuestra cabeza por el diablo, o sea que cuando estamos en ese proceso, estamos utilizando cosas que el diablo puso en nuestra cabeza. El deseo es producto de la unión sexual, y no la unión sexual producto del deseo. Porque primero existió el hombre y la mujer y ambos concibieron el deseo. De lo contrario solo se da lugar a través de un agente que lo genere externamente. Por lo tanto si no existe ese agente (El Diablo), no existiría la trasgresión sexual.



El color blanco, es blanco, y el negro es negro.

El amor es la esencia que no se debe diluir, porque nunca deja de ser. por eso no se puede buscar amor en donde el amor puede ser manchado. Si el blanco es levemente manchado por cualquier puntito de cualquier color, deja de ser blanco y tiende a oscurecerse. Lo mismo pasa con el amor. Ese acto tan pleno en donde dos se convierten en uno, donde juntos se cohabitan. Un cuerpo de dos, ese momento tan intimo y supremo solo se consigue, si hay un mismo sentimiento, es donde el hombre y la mujer son iguales. Pero si no hay el mismo amor de los dos lados, ese ritual de unión espiritual, se mancha, se arruina y los dos no son iguales. Se pervierte o sea se deforma para mal. Pablo al referirse al amor entre esposos, tomo como analogía el amor que siente Cristo por la iglesia, o sea que, elevó y santificó, al punto máximo la relación matrimonial. La Perversión es transmutar algo de manera maliciosa y disfrutar corrompiéndolo. O sea que lo que en un principio fue pensado por dios como una manera de comunión espiritual, la perversión lo deforma. ¿Como? Transgrediendo las leyes de Dios. Así como destruimos algo cuando lo usamos mal.



¿Pero porque Dios doto al sexo de placer? ¿A caso la búsqueda del placer es la causa de la perversión?

Gracias esa atracción natural generada entre hombre y mujer, hace posible esta unión tan profunda, santificada por sus votos matrimoniales, cuerpo alma y espíritu se relacionan profundamente, Dios dota a la unión carnal de este matrimonio con placer físico, para que todas las partes se vinculen plenamente, generando un fuerte impacto, un sentir distinto, especial y único, permite compartir entre los esposos una misma sensación única. El punto de inflexión en esta unión, la podría dar el alma, la cual puede llegar a malograr esta armonía, Divina. Porque, el campo de batalla entre el hombre y el Diablo es la mente, el enemigo intenta entre otras cosas, deformar todos nuestros conceptos, y preceptos a través de pensamientos, de modo que modifica nuestros enfoques a cerca de la manera de sentir o hacer las cosas. Y como la mente forma parte de nuestra alma, y en el alma están también contenidos los sentimientos, parecería que existe la posibilidad de dominar de alguna manera estos sentimientos, mediante el acceso a nuestros pensamientos.

Por ejemplo, una persona sadomasoquista, no concibe el placer extremo, sin que exista un ingrediente de dolor físico en la relación sexual. Cuando en realidad el placer obedece a la satisfacción física, en lugar del dolor, satisfacción que obedece a acciones promovidas por el amor. O por ejemplo el fetichismo, la persona necesita cierta vestimenta para exaltar el deseo.

El homosexualismo, por ejemplo, concebido en el corazón del Diablo, con el objeto de destruir moralmente a la persona, y quitarle su identidad. Degradar y destruir la unión sexual plena atentando contra las leyes de Dios.

Un menage a trois (del francés: arreglo a tres) es un término que describe un acuerdo en el que tres personas tienen relaciones sexuales de cómo un acuerdo. Al ser los roles sexuales tales; Hombre y Mujer, y la relación sexual darse entre 2 personas. El tercer integrante pasaría a ser objeto de consumación de una relación homosexual de los otros dos. El enemigo crea así en el pensamiento de las personas una dualidad de conceptos, borrando la línea divisoria entre lo bueno y lo malo para el propio ser humano. Manchando el cuerpo puro del matrimonio, porque el diablo sabe que el espíritu y el alma se unen en un solo cuerpo. Esa es la pureza perfecta, y el la quiere desnaturalizar.



¿Qué podría ensuciar esta unión sagrada?

El alma puede ensuciar y destruir el cuerpo. En este caso ambos; esposo y esposa, beben de una sustancia pura llamada Amor, sustancia que no se debe adulterar. No se debe diluir o degradar con otras sustancias. Debe permanecer puro. Si diluimos el amor, mezclándolo con otras sustancias menos nobles, lo diluimos y pierde su esencia. Porque cuando se produce el adulterio se integra alguien mas al matrimonio, ya sea deseos y sensaciones mas alla del esposo-esposa, o otra persona, entonces ya no son dos, sino 3 o mas. Y como el acto sexual es una union, se comparten cosas, las cuales despues se terminan compartiendo entre todos. Por eso Dios expresa el concepto de adulterar una sustacia pura. A aparte si el esposo o la esposa recurren a otra persona, significa que esa conexión plena, se perdió o nunca existió. Y que ya uno no completa al otro. Debido quizas, a que nunca sucedió o si sucedió, algo paso en el camino. Pero la buena noticia es que Dios, si lo deseamos nos llena de amor, tanto que puede hacer florecer un hermoso rosal y sustentarlo, en medio del abrazador desierto. Y tanto así, que ese desierto deja de ser.

Conclusion:
 La idea del diablo es destruir la familia, y así distorsionar las relaciones dentro del seno familiar, y lograr destruir la identidad de la familia y sus integrantes. No podemos menospreciar al sexo en nuestra vida ya que es significativamente importante en la integridad del ser humano. El plan del diablo es destruir la familia, y una forma es deformando la identidad sexual.

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